La génesis de la violencia - por Flor Moreno

Sociedad|Opinión


El fracaso y la frustración, son la génesis de toda clase de violencia.


A lo largo de la historia hemos visto las peores atrocidades cometidas por el ser humano; no existe otra especie sobre el planeta capaz de autodestruirse en nombre de la paz, la verdad y la justicia.  La especie humana, camina hacia su propio abismo guiado por sus mesquindades, su vanidad, su egoísmo y su locura; al tiempo que se escudan en frases al estilo de "es por el bien de la humanidad" o "lo hago para defender los derechos de los más vulnerables". Mientras esto sucede, el resto miramos hacia otro lado y solo aparecemos cuando todo lo que sabíamos podía suceder ya paso, como en "crónicas de una muerte anunciada" de Gabriel García Márquez.
Veamos la historia mas reciente, la mas cercana, Argentina 2018: cada tanto tiempo aparece la sociedad enardecida y embanderada al grito de "Ni una menos" o "Yo soy... Santiago, Iván, Mariana, Matías, Gimena..." Pero, ¿Qué pasó antes? ¿Dónde estaba esa misma gente cuando éstas personas reclamaban por sus derechos y pedían ayuda a gritos? Seguramente "mirando a Rial o jugando al Preguntados"
Cuando la violencia se instala en la sociedad algo muy mal estamos haciendo: desde las bases hasta la cima, familia, escuela, instituciones recreativas o religiosas, agrupaciones políticas, el estado todo.
La violencia esta instalada en nuestra sociedad actual: y no me refiero solamente a la mal llamada violencia de género. Nuestra sociedad está fallando en cuanto a prevención de la violencia, es más ya no se trata de prevenir sino de ver cómo revertimos está situación.
El fracaso y la frustración son la génesis de toda clase de violencia. Cuando un individuo siente que su vida no tiene valor, cuando siente que no puede hacer nada para mejorar o modificar sus expectativas de vida, se frustra, se enoja, comienza a comparar su situación con la de otros y si su mirada no es una mirada empática y resiliente, se vuelve un ser agresivo, retraído, o fracasado. Todas situaciones generadas por si mismo, por sus propias creencias, que muchas veces se vuelven profesías autocumplidoras. Estar al lado de alguien con éste nivel de agresividad se vuelve un infierno para quienes están alrededor, peor, si éste enojo se vuelca en una persona determinada: no importa cual sea el motivo inicial, si se obsesiona con alguien porque cree que ésta tiene todo lo que ella no y que esto es injusto, hará hasta lo imposible por destruir el objeto de su tortura.
Volvamos a las civilizaciones de antaño hasta hoy: Gaza, Palestina, Israel, EE.UU, Argentina, Venezuela... La violencia impera. "Divide y reinarás"
Así podemos ir saltando de lo macro a lo micro y veremos cómo somos parte de un todo, que lamentablemente nos está condenando.
Si me preguntan a mi, les digo desde ya que no quiero levantar ningún cartel diciendo "soy fulanito de tal"; quiero una justicia que actúe como debe y no una que se ampare en leyes frías y obsoletas, porque fui testigo presencial de una respuesta aberrante: "la justicia solo actúa cuando ya el hecho se consumó, cuando ya se violó, cuando ya se mató, se robó o se cometió el delito en sí"
¿Entonces?
No lo sé, pero creo que el cambio es mucho más profundo, hay ideas muy arraigadas en la mente de los ciudadanos y eso lamentablemente se transmitirá a futuras generaciones.  Cuando una persona justifica la violencia, o culpa a la víctima o cuestiona su vida, cómo la tan famosa frase que versa "algo habrá hecho" yo me pregunto: y nosotros ¿Qué estamos haciendo?


       

Comentarios

  1. Texto excelente y profundo. Atrapa mi atención el planteamiento del génesis de la violencia: El sentirse fracasado. No tener lo que otros, impotencia... y que esto es una parte micro de algo macro...y sí...no es privativo de tu país o el mío.
    Los gobiernos estàn fallando en el plano económico, lo que repercute en la educación...la formal y la más importante...la familiar.
    La mayoría de los niños crecen solos...sin brújula, porque ambos padres, si los tienen, llegan cansados, fastidiados, después de laborar por un mísero sueldo. Aquí comienza la frustración, enojo e impotencia mencionadas...y es semilla, porque algunos hijos aprenden y repiten esas conductas.
    Estamos en el problema de REVERTIR esa situación...
    La respuesta no es fàcil...pero hay que empezar desde el núcleo familiar. Eso indudable...recordemos que el ejemplo arrastra.
    Te admiro, Flor, por despertar conciencia.
    LA 😇🌻

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